La gran mentira: puedo entrar en páginas piratas y no me pasará nada si no descargo ficheros extraños o ejecutables.
Muchas personas piensan así, pero aclaremos algo:
Incluso aquellos que no saben mucho de informática pueden entenderlo. Las páginas web modernas tienen algo que les proporciona funcionalidad, interactividad y características propias del siglo XXI: el JavaScript.
¿Qué es esto?
Es un lenguaje de programación que ejecuta acciones cuando usas una página web.
Por ejemplo, cuando haces clic en «Buscar» en este blog, se ejecuta una función en JavaScript que realiza una acción, en este caso, buscar en la base de datos del blog.
El JavaScript puede ejecutarse automáticamente, sin necesidad de que lo actives manualmente. Por ejemplo, las analíticas de Google se ejecutan en determinadas páginas apenas se cargan, registrando información como el navegador desde el que se visita el sitio, la dirección IP, entre otros datos.
¿Y qué tiene que ver con el tema de esta redacción?
Cuando cargas una página, ya sea pirata o no, puede realizar muchas acciones en tu ordenador sin que te des cuenta.
¿Quién sabe? Tal vez infectar tu dispositivo o comprometer tu seguridad.
Por ello, si no tienes conocimientos avanzados de informática, es mejor evitar páginas de dudosa reputación.
Un buen ejemplo son las páginas que permiten descargar vídeos de plataformas de streaming. Aunque al analizarlas con antivirus como VirusTotal parecen estar limpias, al entrar en ellas suelen abrir otras páginas no relacionadas, lo que puede ser un riesgo.
Imagen generada con Microsoft Designer